Un antes y un después

30 marzo 2016

Todo lo relacionado al trasplante tiene sabor a milagro. Nunca pensé que se iba a desencadenar semejante campaña a favor de la donación de órganos. Enhorabuena! Es como si el hecho que vivimos con Sonsoles mi ahijada, hubiera hecho de despertador, de alarma, de llamador, de alerta! “Mirá que se puede, eh?” Haber tenido la compatibilidad necesaria para concretarlo es algo que agradezco todos los días, porque no es tan fácil, porque no es tan común. Por eso me suena a milagro. Y porque todo lo que gira en torno a nuestro pasado 13 de agosto de 2012, está relacionado con lo mejor que tenemos los seres humanos: con el amor, y para mi seguro que es un antes y un después. Vivimos una vida corta que es un regalo, una bendición. Y muchas cosas cambian a partir de nuestra actitud, de nuestra intención. Estoy convencida que todo sería diferente si Sonsoles no tuviera la garra que tiene, las ganas, la sonrisa, la fuerza, la alegría... más allá de haberle tocado una vida difícil. Yo sentí que me tocaba a mí, ponerme en ese lugar, que tenía que ser la voluntaria, y eso en lugar de arrinconarme, me dio envión, me empujó y me dejé llevar por lo que estaba sucediendo. Dar vida debe ser una de las cosas más importantes y bellas. Lo he vivido plantando árboles, viéndolos crecer, regándolos... No me tocó ser madre y siento que eso no importa. Damos vida cuando amamos, cuando elegimos, cuando cuidamos, y podemos dar vida aún cuando nos vamos, cuando ya no tenemos la posibilidad de seguir en esta tierra. Pensémoslo, está bueno! Vieron “MAGICA”? Es un cortometraje muy bello en el que pudimos sumar con mi hermano Vane, la música. Mírenlo, los va a ayudar a pensar (y los va a hacer llorar! Jajajajaaa) Me siento bien, estoy sana y nada ha cambiado… aunque en realidad todo cambió. Soy una mujer argentina, orgullosa de serlo, muy feliz y eternamente agradecida por todos los privilegios que me han tocado en esta vida. Espero que cada uno pueda vivir la vida que elija y que podamos construir un país donde todos tengamos las mismas posibilidades. Sandra